domingo, 31 de octubre de 2010

ESCUCHAR SU VOZ...



Si oyereis hoy su voz, no endurezcáis vuestros corazones.Hebreos 4:7.
Se cuenta la siguiente historia: Un gato vivía en un buque carguero. Una tormentosa noche el buque encalló en una costa rocosa. Durante el salvamento de la tripulación se olvidaron del animal. Después, un marinero volvió al buque accidentado para buscarlo. En ese momento el gato estaba comiendo en la cocina. Cuando lo vio entrar trató de escaparse de él continuamente hasta que el hombre, sin lograr su propósito, tuvo que abandonar el buque naufragado. Por fin el gato estuvo tranquilo… hasta que el barco se hundió completamente.

       Es triste pensar que muchas personas tienen la misma actitud; siguen la corriente de este mundo diciendo: Comamos y bebamos, porque mañana moriremos (Isaías 22:13). Efectivamente, corren gran peligro, pues la Biblia nos enseña que todos los seres humanos son pecadores y están destituidos de la gloria de Dios (Romanos 3:23). Además dice claramente: Está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio (Hebreos 9:27).

       Muchos viven sin preocuparse de esta advertencia, como si su alma no corriese peligro. Y cuando Dios quiere mostrarles su amor y les presenta al Salvador que murió en la cruz para que seres pecadores pudieran ser salvos, huyen de él o cierran sus oídos y su corazón al Evangelio.

       Esta es la invitación de Dios:
Todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo
(Romanos 10:13).

domingo, 24 de octubre de 2010

UNA ADVERTENCIA...

No hay diferencia, por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, siendo justificados gratuitamente por su gracia.
Romanos 3:22-24.
Marcos estaba trabajando sobre el andamio. Hacía sólo dos semanas que había empezado su aprendizaje. Tuvo que hacer su primer trabajo en una torre muy alta. De repente el capataz gritó: – ¡Salgan todos de ahí! Pero antes de que Marcos pudiera alcanzar un lugar seguro, la torre se desplomó. Tres días después hallaron su cadáver bajo una losa de siete toneladas. ¿Por qué tuvieron que morir de esta manera Marcos y otros tres obreros?

       Hace unos 2.000 años, en Jerusalén se derrumbó la torre de Siloé, matando a dieciocho personas. En aquel entonces el Señor Jesús, preguntó a sus oyentes: –“¿Pensáis que eran más culpables que todos los hombres que habitan en Jerusalén?”. Él mismo dio la respuesta: “Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente”.

       Ante Dios todos los seres humanos, y no sólo los que son víctimas de un trágico destino, son pecadores que merecen el juicio divino. Todos necesitan la salvación que Dios ofrece a cada ser humano en virtud del sacrificio expiatorio en la cruz del Gólgota; deben arrepentirse de sus pecados, confesarlos sinceramente a Dios y creer en el Señor Jesús como su Salvador, de otra manera están perdidos.

       La muerte inesperada de algunas personas es una advertencia para nosotros. Nadie sabe de antemano cuál será el día de su muerte. Ésta puede llegar repentinamente. Entonces será demasiado tarde para convertirse. Hoy, mientras vivimos, debemos ponernos en regla con Dios.

miércoles, 20 de octubre de 2010

PASADO...

Te acordarás de todo el camino por donde te ha traído el Señor tu Dios.Deuteronomio 8:2.

Cuán importante es vivir hoy por la fe y recibir cada momento del día como un don de Dios, confiando en él! Entonces, ¿qué lugar tiene el pasado en el presente?

      El pasado puede ser un obstáculo para su vida presente si lo embellece demasiado y fomenta así una nostalgia que le paraliza. Nunca digas: ¿Cuál es la causa de que los tiempos pasados fueron mejores que estos? (Eclesiastés 7:10). Refugiarse en el pasado le impide hacer frente a su responsabilidad actual.

       Sin embargo, a veces necesitamos volver al pasado para juzgar nuestros hechos. Dios otorga su perdón a aquel que se acerca a él y le confiesa sus faltas. Si hemos recibido el perdón de Dios, no sería lógico atormentarnos por pecados pasados que ya hemos confesado al Señor, aun cuando debamos soportar ciertas consecuencias. Nuestro Dios es un Dios que perdona.

       También es útil recordar el pasado para evitar repetir los mismos errores. Se ha dicho que los verdaderos hombres de progreso son quienes tienen un gran respeto por el pasado. Acordémonos de aquellos que nos dieron el ejemplo de una vida de fe con el Señor, y también de todo lo que él hizo por nosotros, sus consuelos, sus liberaciones y respuestas a nuestras oraciones. Entonces podremos vivir intensamente cada día, esperando Su retorno.

domingo, 17 de octubre de 2010

QUE QUEDARA...

Yo sé a quién he creído, y estoy seguro que es poderoso para guardar mi depósito para aquel día. (2 Timoteo 1:12.)
En la noche del 20 de abril de 1945, un conde enterró en el bosque de propiedad familiar, al norte de Berlín, su vajilla de plata y de porcelana. Esto ocurrió algunos días antes de que él, su madre y el personal de servicio, huyeran ante el avance del ejército rojo. Medio siglo más tarde, el conde pudo volver a encontrar su tesoro casi intacto, gracias a un croquis del lugar. En una subasta obtuvo una gran suma de dinero por su bien recuperado.

¡Qué feliz resultado para los propietarios! En cambio, muchas personas perdieron definitivamente sus bienes y tesoros: las riquezas terrenales son muy inseguras.

En el versículo del encabezamiento el apóstol Pablo habla de un depósito muy diferente que él entregó a Dios, confiando plenamente en que él lo guardaría. También está seguro de que en aquel día lo volverá a encontrar, ya puede alegrarse por ello.


¿Qué podía confiar a Dios un hombre como Pablo? Su vida y todo el trabajo de su vida. Él escribió estas palabras poco antes de su martirio, de modo que son muy significativas. Nadie puede subestimar semejante certeza.

Por eso nos atrevemos a preguntarle, querido lector: ¿Qué quedará de su vida cuando usted deba dejar este mundo? Los bienes y los honores terrenales no tienen valor en el más allá. Al aceptar al Señor Jesús como Salvador personal usted puede tener la seguridad de su salvación, del perdón de sus pecados. ¡Qué alegría poder partir de esta tierra con esta certeza!

martes, 12 de octubre de 2010

ESTA MUY OCUPADO...

Dios sólo pide una cosa, algo muy simple: que se le escuche con fe.

Dios quiere bendecirle, pero usted está muy ocupado; nunca tiene tiempo. ¡No tiene tiempo para acercarse a él! ¡No tiene tiempo para escuchar su voz! ¡No tiene tiempo para alimentar su alma! ¡No tiene tiempo para recibir la gracia de Dios!
El tiempo que empleamos para acercarnos a Dios y estudiar su Palabra es el tiempo mejor utilizado y el que mayor rendimiento producirá en nuestras vidas. Debemos leer la Biblia siguiendo capítulo tras capítulo y no solamente al azar. Es bueno tener un plan de lectura, un método, leer con atención, oración y humildad. En esos momentos silenciosos Dios nos habla especialmente. Si él es precioso para nuestros corazones, estaremos atentos a su Palabra.
No piense que es necesario comprender todo de una vez y poder explicar todo lo que la Biblia nos dice. La Sagrada Escritura, como su autor, Dios mismo, siempre nos superará; pero el Espíritu Santo nos conducirá hacia la verdad según nuestra fe y obediencia. Sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores (Santiago 1:22).

Otra manera de aprovechar la lectura de la Biblia es considerar y meditar una porción en especial: copiar en un cuaderno los textos que nos hayan hablado más y repasarlos hasta memorizarlos. Buscar otras citas parecidas

miércoles, 6 de octubre de 2010

SER AGRADECIDO...


Doy gracias a mi Dios siempre que me acuerdo de vosotros.
(Filipenses 1:3)

Un corazón agradecido es esencial para el verdadero servicio espiritual. Si está tratando de servir al Señor sin gratitud en su corazón por lo que ha hecho por usted, entonces está sirviendo en la carne con motivos incorrectos. Alguien que es agradecido comprende que Dios tiene una razón para todo lo que ocurre. Alguien que sirve de forma externa, legalista o ritual no hallará muchas cosas por las cuales estar agradecido en su vida porque no es agradecido por las cosas que Dios ya ha hecho por él.

¿Tiene usted un corazón agradecido? ¿Se siente entusiasmado con acción de gracias por lo que Dios ha hecho? Si es así, entonces no sentirá amargura ni resentimiento hacia Dios ni hacia nadie más.
Hay mucho de qué estar agradecido. A menudo Satanás nos tienta diciéndonos: "Mereces algo mejor que eso. No tienes por qué estar agradecido". Pero cuando él lo haga, ¡cerciórese de recordar por cuántas cosas tiene que estar agradecido!

martes, 5 de octubre de 2010

EL PERDON...

Un joven empleado cometió una grave falta profesional. Citado a la oficina del director, esperaba ser despedido inmediatamente e incluso quizás ser llevado ante los tribunales.

Su jefe le preguntó si reconocía su culpa y el joven, entristecido, contestó afirmativamente. En estas condiciones, prosiguió el director, no lo perseguiré judicialmente y yo mismo compensaré el perjuicio que usted causó. Confundido, el empleado permaneció silencioso, y cuando se disponía a salir, el jefe agregó: –En esta empresa usted es la segunda persona que ha cometido una falta grave y luego ha sido perdonada. La primera fui yo. Lo que usted hizo también lo hice yo, pues también fui beneficiario de la indulgencia que se le otorga. Soy cristiano.

 Esta historia muestra cómo un creyente puede poner en práctica las enseñanzas del Señor Jesús, no para confiar en todo el mundo, sino para perdonar a quien reconoce sus faltas. Cuando uno es verdaderamente consciente de la deuda que Dios nos perdonó a través de Jesús, da testimonio con mayor facilidad y desea profundamente la reconciliación. El perdón crea una nueva relación entre el ofensor y el ofendido.

Que Dios nos ayude a ser cada vez más conscientes del estado en que su amor nos halló para que seamos capaces de perdonar cómo él lo desea.

LA GLORIA DE DIOS

Porque Dios salva…Para que abundando la gracia por medio de muchos, la acción de gracias sobreabunde para gloria de Dios.
2 Corintios 4:15
Muchos piensan que la razón principal de que Dios salve a las personas es para poder mantenerlas fuera del infierno, para que puedan experimentar su amor o tener vidas felices. Pero todas esas razones son secundarias.
Dios salva a las personas porque es una afrenta a su santo nombre que alguien viva en rebeldía contra Él.  El que las personas reciban la salvación  es  importante para Dios; Pero   mas importante es su gloria .
El apóstol Pablo dijo de Jesucristo "Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre" (Fil. 2:9--11). La salvación es para la gloria de Dios.
Dios es glorificado cuando las personas creen en su evangelio, aman a su Hijo y aceptan su diagnosis de la mayor necesidad que tienen, que es el perdón del pecado. Sin duda usted se beneficia de la provisión de Dios de salvación, pero usted existe para la gloria de Dios.

domingo, 3 de octubre de 2010

EL RELOJ

Un hombre compro por un precio economico un magnífico reloj de chimenea que daba un hermoso aspecto a su sala. Por desdicha, el reloj tenía un grave defecto: indicaba la hora sólo dos veces por día, es decir, no funcionaba. Por más que él le diera  cuerda, o lo sacudiera, el balancín permanecía inmóvil. Era magnífico pero inútil.


En este mundo hay muchas personas que se parecen a este reloj, pues no cumplen con la función para la cual el Creador las destinó. ¿Para qué nos creó Dios? Para hacer su voluntad. ¿Y cuál es la voluntad de Dios? Que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad (1 Timoteo 2:4).


Cierta vez los judíos le preguntaron a Jesús: ¿Qué debemos hacer para poner en práctica las obras de Dios? Respondió Jesús y les dijo: Esta es la obra de Dios, que creáis en el que él ha enviado (Juan 6:28-29). Si no hacemos la voluntad de Dios, malogramos la meta de nuestra existencia; y por más hermosa que sea nuestra apariencia, somos como ese reloj: inútiles. Además, somos desobedientes, porque Dios ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan (Hechos 17:30).

Arrepentimiento y fe son las llaves que nos harán funcionar para ser útiles a nuestro Creador, el divino relojero. Entonces él nos mostrará lo que espera de nosotros día a día. Tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia (Hebreos 12:28).

VUELVASE...

Cristina tenía un hogar, un marido amable e hijos sin problemas. Un día abandonó todo por una pasión pasajera. De una decepción a otra, cayó en el libertinaje. Cada vez era más consciente de que había arruinado su vida, de manera que se hundió en una profunda depresión.

En el hospital psiquiátrico donde terminó por ser internada, nadie pudo apartarla de sus ideas suicidas. Era como si hubiese ingresado en un engranaje infernal; y en su cabeza, una voz murmuraba: la única salida es la muerte. Era la voz del diablo. La Biblia nos asegura que él es homicida desde el principio, es mentiroso, y padre de mentira (Juan 8:44). Es fundamental saber que Dios, en cambio, apela a la vida.

Amigo, si usted está en una situación parecida a la de Cristina, cayendo cada vez más bajo, arrepiéntase y vuélvase a Dios: Palabra fiel y digna de ser recibida de todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores (1 Timoteo 1:15). A través de todos los tiempos, se puede oír su voz llamando a los pecadores al arrepentimiento (Lucas 5:32).

 Él es ese buen samaritano que se inclina hacia aquellos que el pecado ha dejado medio muertos, para traerlos a la vida. Pero es necesario creer de todo corazón que él tiene potestad en la tierra para perdonar pecados (Lucas 5:24). Él mismo pagó el precio de nuestro rescate al morir en nuestro lugar.

JESÚS...

Dios envió a su Hijo unigénito al mundo, para que vivamos por él. (1 Juan 4:9)


Muchos dudan de si existió en realidad Jesús, pero muchos historiadores han escrito acerca del Señor Jesucristo.
 
Alrededor de 114 d.C., el historiador romano Tácito escribió que al fundador de la religión cristiana, Jesucristo, le dio muerte Poncio Pilato en el reinado del emperador romano Tiberio (Annals 15.44).


Plinio el menor escribió una carta al emperador Trajano sobre el tema de Cristo y los cristianos (Cartas 10.96--97).


En 90 d.C., el historiador judío Josefo escribió una breve nota biográfica acerca de Jesús: "Fue alrededor de ese tiempo que Jesús, un hombre sabio, si es lícito llamarlo hombre, ya que era un hacedor de obras maravillosas, maestro de tales hombres cuando recibían la verdad con agrado. Atrajo hacia Él a muchos de los judíos y a muchos de los gentiles. Él era Cristo" (Antigüedades 18.63).


El Talmud se refiere a Jesús de Nazaret (Sanhedrin 43a, Abodah Zera 16b--17a).


Jesús fue un hombre en la historia. Y sus reclamos fueron ciertos. ¿Duda de su poder para salvarlo a usted

NECESITO A ALGUIEN

Necesito de Alguien….
Que me mire a los ojos cuando hablo.
Que escuche mis tristezas y angustias con paciencia y aún cuando no comprenda, respete mis sentimientos.
Necesito de alguien que venga a luchar a mi lado sin ser llamado.
Alguien lo suficientemente amigo para decirme las verdades que no quiero oír, aún sabiendo que puedo irritarme.

 Por eso, en este mundo de indiferentes, necesito de alguien que crea en cosas misteriosas, desacreditadas, casi imposibles como la amistad, la democracia, la justicia, la sinceridad, la familia, el amor y Dios.
 Que se obstine en ser leal, simple y justo.
 Que no se vaya si algún día pierdo mi oro y no pueda ser más la sensación de la fiesta.

 Necesito de un amigo que reciba con gratitud mi auxilio, mi mano extendida, aún cuando eso sea muy poco para sus necesidades.

 No pude elegir a quienes me trajeron al mundo, pero puedo elegir mi amigo.

 En esta búsqueda empeño mi propia alma, pues son una amistad verdadera, la vida se torna más feliz, más rica y más bella.

Vuelve ahora en amistad con él, y tendrás paz; Y por ello te vendrá bien. Job 22:21

Que juntos comunicábamos dulcemente los secretos, Y andábamos en amistad en la casa de Dios. Salmo 55:14

El que cubre la falta busca amistad; Mas el que la divulga, aparta al amigo.
Proverbios 17:9